Carlos, un contador independiente en crecimiento, decidió formalizar su negocio. El reto era encontrar una dirección fiscal válida sin gastar en una oficina fija. Descubrió que el alquiler de oficinas virtuales con domicilio fiscal no solo cumplía los requisitos del SAT, sino que también proyectaba profesionalismo ante sus clientes. Hoy, atiende desde cualquier lugar con una imagen...